Las Antenas Humanas (parte 1)

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Para impedirnos descubrir las verdaderas intenciones de los Científicos y, sobre todo, para quitarnos cualquier posibilidad de reaccionar, privándonos del tiempo diario e intentando llenarnos la mente de compromisos y pensamientos, explotaron las Antenas Humanas a niveles muy altos. Fue así como nos dimos cuenta de que los científicos tenían un fuerte control sobre la Matrix que nos rodeaba, no solo porque utilizaban los códigos de la Matrix, sino porque utilizaban a las personas como antenas andantes de su propiedad, con las que rodeaban a la persona objetivo y empujaban a todos contra ella. El uso de las Antenas Humanas nos pareció que había comenzado hacía pocos años, pero al observarlo detenidamente podemos ver enormes correlaciones y similitudes con acontecimientos ya descritos hace milenios, lo que demuestra que ciertas personas siempre han sido utilizadas como Antenas. Acontecimientos en los que algunos individuos enloqueciían repentinamente y empezaban a hacernos perder tiempo y energía llevaban ocurriendo desde hacía muchos años y los catalogábamos como antenas enviadas por el Bajo, y posteriormente como antenas enviadas por el Bajo Artificial, es decir, personas influenciadas por tecnologías alienígenas para empujarlas a enloquecer e intentar hacernos perder tiempo y energía por las razones más estúpidas y banales. Pero con el inicio de la batalla incesante con los fanáticos poseídos, empezamos a darnos cuenta de que ya no se trataba del Bajo, ni se podía catalogar simplemente como Bajo Artificial, porque había algo mucho peor que estaba trabajando desde atrás. Empezamos a darnos cuenta de que se trataba de posesiones reales, pero no posesiones demoníacas como nos hacían creer las películas, creadas expresamente para manipularnos y desviarnos siempre del camino, sino posesiones alienígenas que servían para acceder a esta dimensión a través de cuerpos humanos. Comprender este tema será complicado, pero será necesario porque, a partir de 2023, habrá cada vez más Antenas Humanas poseídas artificialmente, por los alienígenas y los científicos que trabajan para el Gobierno. Es importante estar preparados. Las Antenas Humanas son personas aparentemente iguales a las demás, de carne y hueso, con la diferencia de que en su interior no hay Alma: son Bots. Si ya has leído los volúmenes sobre El Sello de las Vidas Pasadas antes de llegar a este libro, ya conoces la diferencia entre Conciencias y Almas, pero el tema es mucho más amplio y complicado que eso. Para simplificar el concepto, de los aproximadamente 8000 millones de personas que existen en el mundo, contando solo las que viven en la superficie, como nosotros, sin contar todas las que viven y trabajan bajo tierra, un porcentaje enorme de humanos son bots; un porcentaje modesto son Conciencias, entre las que se encuentran la mayoría de las muy jóvenes, pero también Conciencias más maduras; en conclusión, hay en el mundo un porcentaje muy pequeño de personas que pueden considerarse Almas, más o menos maduras, pero que son inevitablemente más expertas que las Conciencias. Más adelante te explicaré por qué en este planeta hay Almas, Conciencias y Bots en estos diferentes porcentajes y qué hacemos todos juntos aquí, mezclados en una gran sopa variada. Es fácil autodefinirse como Alma en lugar de Conciencia, autodefinirse como maduro y antiguo en lugar de «recién nacido», pero lo que podemos observar es que la mayoría de los que se autodenominan almas despiertas son en realidad Bots y/o Gaia's Low, es decir, personas que pertenecen a Gaia y que nunca han visto ni una pizca del Alma. En el pasado, los bots eran aquellos que se mantenían alejados de la espiritualidad como si fuera la peste, pero hoy en día los bots son poseídos deliberadamente para introducirlos en los caminos espirituales con el fin de que causen el mayor número posible de víctimas. Si no te abres al conocimiento de los alienígenas, nunca entenderás por qué de repente tantos bots se han vuelto «interesados en la espiritualidad» y seguirás confundiéndolos con «almas despiertas» debido a las numerosas veces que ellos mismos lo repiten, solo porque se mezclan con la gente que realmente está interesada en el camino del despertar. Estas personas Bot son empujadas hacia los Caminos Espirituales por los mismos Amos oscuros que las controlan a distancia, para que siembren el caos y el desorden entre la gente y consigan que caigan tantos espirituales —verdaderos— como sea posible en las trampas artificiales creadas por los alienígenas. 

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Por lo tanto, si los alienígenas logran empujar a las Conciencias jóvenes hacia errores clamorosos, aunque se trate de personas que ya tienen algunas vidas pasadas de las que deberían haber aprendido, pero no ha sido así, piensa en lo que pueden hacer con los bots, es decir, personas humanas en cuyo interior no hay Conciencia, ni a : los poseen por completo. Partamos del hecho de que los bots son diferentes de las Conciencias: estas últimas son personas que, aunque muy jóvenes en «experiencia espiritual» —que no tiene nada que ver con la edad física—, son Presencias que ya han vivido otras encarnaciones y que, por lo tanto, han logrado reencarnarse una vez más, encontrándose precisamente en este planeta en este mismo período histórico. Los bots no son Conciencias, sino códigos de esta misma Matrix: son personas que solo existen en esta Dimensión, no poseen una Conciencia/Alma capaz de reencarnarse y vagar por el universo, como pueden hacer todos aquellos que logran reencarnarse. Los bots existen en la Matrix de este planeta, son personas-proyecciones, que en apariencia parecen iguales a cualquier otro ser humano que estudia, trabaja, tiene sus aficiones y forma una familia: por lo tanto, los bots pueden ser hijos, padres, parientes, vecinos, cualquiera. Nunca los reconocerías basándote únicamente en su aspecto físico y, si lo hicieras, con toda seguridad te equivocarías por completo al asociar a un alma el título de bot y viceversa, simplemente porque tu método de reconocimiento sería erróneo. No puedes reconocer a un alma o a un bot por su aspecto físico, tenlo por seguro. Podrías encontrarte con una mujer muy guapa y convencerte de que es un Alma porque es muy bella estéticamente, pero luego descubrirías que se trata de un Bot. Podrías conocer a una mujer preciosa y convencerte de que es un Bot solo porque es demasiado guapa para ser un Alma (¿según qué idea?) y te equivocarías, porque esa mujer preciosa podría ser un Alma y tú habrías caído en la idea retorcida de que las Almas tienen que ser necesariamente guapas por fuera y guapas por dentro, o necesariamente feas por fuera porque son guapas por dentro. Insisto en que no se puede basar en absoluto en el aspecto físico para distinguir los bots de las almas, así que partamos de la base de que el único método para comprender cuál es la verdad es percibir quién hay detrás de esa persona mediante el uso de técnicas específicas. Y aquí es donde la cosa se complica. Esto se debe a que, durante y a causa de las posesiones, los bots parecen de repente más poderosos y capaces que los verdaderos almas. Todo esto ocurre en apariencia, sí, pero es una apariencia que dura demasiado tiempo y que engaña muy fácilmente a la gran mayoría de las personas. Los bots son presencias de esta Matrix, son códigos cuyo único propósito es llenar este planeta de seres humanos que en realidad ni siquiera existirían, pero que en esta dimensión existen y, por lo tanto, como seres vivos, deben ser tratados sin crear ese tipo de «discriminación» que a estas alturas todos deberíamos haber comprendido que no son más que métodos que la Oscuridad utiliza para enfrentarnos unos contra otros mientras disfruta del espectáculo. Las Almas no se han reencarnado en este planeta para odiar a los Bots, sino para salvar este planeta, incluyendo a tantos Bots como sea posible; aunque algunos no tienen ningún deseo de ser salvados y, en ese caso, pueden irse al infierno. La dificultad para distinguir unos de otros proviene del hecho de que el Gobierno y todos los oscuros que están en la cima y controlan la sociedad humana han hecho que las Conciencias y las Almas se comporten exactamente como se comportan los Bots. Esperas, erróneamente, que las Almas, nada más nacer en este planeta, se hagan reconocer inmediatamente como seres extremadamente evolucionados, como tantos Jesuses reencarnados. Partamos de la base de que solo hay un Jesús y que ser Alma no significa ser igual a Jesús: hay Almas jóvenes, Almas de todas las edades, Almas muy antiguas y muy maduras; también hay Almas extremadamente poderosas; y luego está Jesús, que es único, así como una de las Almas más poderosas de todo el Universo, por lo que nadie puede ni debe compararse con ese tipo de Alma. 

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Sin embargo, esperas que las Almas, una vez reencarnadas en este planeta, estén ya todas listas y Despertadas, que sepan inmediatamente reconocer lo que está bien y lo que está mal, y así sucesivamente. En mi experiencia, he conocido algunas Almas y muchas Conciencias más o menos maduras, pero lo que he podido constatar es que, tan pronto como se entra en este planeta, cualquiera cae en un sueño profundo y se olvida de comportarse como un Alma, acabando por comportarse como un Bot. Primero vienen las actividades futiles como las tareas cotidianas y luego, y solo entonces (y solo cuando tienen ganas, en raras ocasiones), vienen las misiones por las que nos hemos reencarnado en esta dimensión. Todos se elogian a sí mismos diciendo que están aquí para grandes misiones, pero estas grandes misiones nunca coinciden c con las reales y, de hecho, son muy pocas las personas que recuerdan que están aquí por una razón y actúan para concretarla y no para vivir completamente sumergidos en lo bajo. Pero después de hacer una meditación débil, corta y mal hecha, sentirán que han cumplido con su deber y luego encontrarán mil excusas para contarse a sí mismos, como por ejemplo: «No hemos venido aquí solo para luchar, ¡también estamos aquí para disfrutar un poco de Matrix!» o «No he venido a este planeta solo para practicar, también tengo que adquirir experiencia en el Low», y cada vez pienso en los soldados que van a la guerra y, mientras se encuentran en medio de un tiroteo contra el ejército enemigo, se detienen a charlar entre ellos, riendo y bromeando, y dicen: «¡No hemos venido aquí solo para dispararnos! ¡Ahora quiero disfrutar un poco del paisaje!», y mientras tanto son acribillados por sus adversarios y caen al suelo moribundos de la forma más ridícula posible. Por si aún no te has dado cuenta, nos encontramos en una Guerra Psíquica en la que no hay tiempo para jugar a los listillos; hay que Practicar en serio. No hemos venido a este planeta para quedarnos dormidos en el Low, hay que dejarlo claro para quienes aún no lo hayan entendido. Por supuesto, me dirijo a las Almas, mientras que los Bots pueden pasar página tranquilamente e ignorar estas líneas, porque este tema no va dirigido a vosotros, que existís en este Matrix solo para ocupar vuestros días con actividades Low y que no tenéis nada que ver con la Psíquica. La práctica está destinada a las Almas y a una parte de las Conciencias que pueden soportarla, por eso la gran mayoría de las personas, incluso entre los bots que se infiltran en los grupos espirituales y fingen estar interesados en el tema, ¡cuando no lo están! — insisten en autoconvencerse y en intentar convencer a los demás de que para Evolucionar no hay necesidad de Practicar y que basta con convencerse de que ya están despiertos para hacer realidad esta idea. Con absoluta certeza, las Conciencias y las Almas se sienten impulsadas a practicar porque sienten que es la única manera de volver a ser ellas mismas; todos los demás no necesitan buscar caminos para recuperar su identidad completa, ya que lo que son es ya todo lo que pueden ser. Las Conciencias y las Almas buscan el camino del Despertar y se sienten profundamente impulsadas a practicar precisamente para alcanzar el camino que les permita completarse, es decir, despertar y recordar quiénes eran y quiénes deben ser, y recuperar el control total de sus facultades. Pero, ¿qué debería recuperar quien no posee el Alma? ¿Qué debería recordar o qué facultades debería recuperar? Ninguna, por eso no tiene ninguna necesidad de buscar un camino hacia el Despertar, porque no tiene nada que despertar. Comprender este tema, que es duro y difícil de aceptar porque aparentemente es insensible, te será cada vez más útil con el paso del tiempo para comprender quién está aquí para actuar y quién está aquí para despistarte y hacerte caer; más aún porque en los próximos años habrá un aumento de antenas humanas, entre las que se encuentran los bots y algunas conciencias jóvenes que serán utilizadas como si fueran bots, por lo que cada vez será más difícil confiar en la gente.

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Dado que el nivel de evolución está bajando en muchos, sobre todo debido al suero inyectado en 2021-2022, numerosas Conciencias que hasta hace poco habrían tenido la posibilidad de reencontrarse y Despertar, tras el suero caerán en un sueño profundo y, mientras tanto, su cuerpo será utilizado como si fueran antenas humanas, tal y como ocurre con los bots. Dicho esto, hay tantas Conciencias y tantas Almas que se comportan como los Bots, que resulta difícil reconocerlas simplemente observando su aspecto o su forma de comportarse durante la vida, también porque por experiencia personal he podido constatar que algunos Bots a veces parecen más lúcidos e inteligentes que ciertas Conciencias que he conocido; si me hubiera fiado de este juicio, habría sustituido gustosamente a ciertas personas por otras. El problema no son los bots, porque no pueden ser más de lo que son; son proyecciones y no se puede esperar más de ellos. El problema son las Conciencias y las Almas que prefieren dormir y comportarse incluso peor que algunos bots, para luego confundir las aguas e inevitablemente hacer que los bots parezcan más evolucionados que ciertas Conciencias. Si las Conciencias y las Almas practicaran de verdad, en lugar de perder el tiempo comportándose peor que los bots, este mundo sería increíblemente más positivo. Esto se debe a que los bots pueden ser poseídos y utilizados como auténticas marionetas para actuar directamente desde el interior de este planeta sin necesidad de que los oscuros que los poseen tengan que reencarnarse: utilizan a los bots como cuerpos con los que actuar en esta Dimensión. Pero si esto ocurre, es también o sobre todo culpa de las Conciencias y las Almas que no practican para impedir que esto suceda, ya que están demasiado ocupadas comportándose como bots y durmiéndose en la cotidianidad baja, olvidándose de que están aquí para proteger este planeta, incluidos los seres humanos sin distinción alguna. Proteger a todos los seres humanos significa también permitir que los bots dejen de estar poseídos por las presencias oscuras y, en el mejor de los casos, quizá empezar a empujarlos para que también evolucionen. Pero todo cambia cuando la situación en la que nos encontramos ahora hace que los bots sean potenciados por las fuerzas oscuras y, mientras tanto, las conciencias/almas reencarnadas se comportan como Gaia's Low, que no esperan más que ser salvadas por alguien más, en lugar de ponerse en marcha y empezar a actuar para ayudar a este planeta, así como para cumplir la misión por la que se reencarnaron. Desde el momento en que los reencarnados prefieren dormir y los bots son completamente poseídos por las presencias oscuras, este planeta acaba cayendo en una especie de oscuridad a un nivel nunca antes visto. Será un tema que volveremos a tratar más adelante. Mientras descubríamos a los científicos y observábamos a todas esas personas que aparentemente no tenían nada que ver entre sí, pero que en su conjunto se complementaban en su intento de ocupar día y noche nuestras vidas para impedirnos atacar a los científicos, Alexander y yo nos dimos cuenta de lo que realmente significaba tratar con los poseídos. Más adelante descubrirás que los Poseídos existen realmente y que están estrechamente relacionados con la Iglesia. Hoy en día, la Secta de la Iglesia está compuesta por los Poseídos, los mismos contra los que luchó Jesús cuando estaba vivo; deberíamos reflexionar sobre lo erróneo que es asociar a Jesús con la Iglesia, ya que nunca deberíamos asociarlo con los mismos enemigos que él repugnaba y que hoy en día explotan su nombre para fingir que están del lado del bien. Observar la increíble obstinación que empujaba a los fanáticos poseídos a enfrentarse a nosotros sin ninguna razón sensata, salvo la de obligarnos a convertirnos a la secta de la Iglesia, nos permitió estudiar muy de cerca una posesión alienígena. No lo veas como una idea, una teoría o una forma de hablar. La Posesión Artificial es real: sustituye literalmente partes del cerebro, de la red neuronal y de los códigos de la Matrix de esa persona, introduciendo códigos artificiales, partes del cerebro creadas en un laboratorio y conexiones neuronales creadas artificialmente, para que la persona en cuestión ni siquiera pueda pensar en rebelarse, sino que solo pueda obedecer las órdenes, o mejor dicho, las señales eléctricas que los Amos deciden enviarle.

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Los fanáticos poseídos fueron para nosotros la fuente más cercana para comprender cómo se producía una posesión artificial, es decir, alienígena y/o gestionada por quienes actúan en nombre de los alienígenas; pero para comprenderlo no nos limitamos a sufrir su maldad, sino que descubrimos esa información atacando sus mecanismos y estudiando atentamente cómo se activaban y llevaban a cabo sus actividades. Nos dimos cuenta de que no estábamos luchando contra dos humanos, sino contra dos tecnologías nunca antes vistas. Esto nos permitió desarrollar una notable experiencia en el campo tecnológico-artificial. Como ya se ha explicado anteriormente, cuando los Bigotti Posseduti se acercaban a Alexander y a mí para lanzarnos su maldad, desde que empezamos a reaccionar y, por lo tanto, a atacarlos, se alejaban durante unos meses, meses en los que no se dejaban ver ni por casualidad. Luego, al cabo de unos meses, volvían, aparentemente más obstinados que antes. ¡No se entendía la razón! Así que los atacábamos de nuevo y desaparecían durante otros meses en los que no se dejaban ver ni oír; luego volvían a la carga. Llegó el día en que decidí que no debía continuar así porque nos estaba haciendo perder demasiado tiempo y energía, y me di cuenta de que también estaba perdiendo salud. A partir de ese momento, decidimos que, además de atacar a los dos Bigotti, debíamos atacar a quienquiera que estuviera detrás de ellos para comprender quién les daba toda esa fuerza. Lo que descubrimos era increíble. Antes de lanzar los ataques contra todos, recuerdo que pedí consejo a la poderosa diosa Sif. Mi deseo era pedirle consejo sobre qué hacer, es decir, preguntarle cómo era posible que, a pesar de atacar a los Bigotti, estos e s dejaran de actuar durante un tiempo, pero luego volvían, en lugar de derrumbarse definitivamente como ocurría con nuestros enemigos anteriores, y pedirle consejo sobre cómo actuar para lanzar ataques mejores o de mayor calidad para que llegaran a su destino de una vez por todas y dejaran de obtener resultados tan irregulares. Invoqué a la diosa Sif para pedirle consejo, pero no fue ella quien respondió a mi conexión. Ese momento fue muy importante, porque invoqué y me concentré en conectarme a la frecuencia de la diosa Sif, pero quien vino a ayudarme fue la diosa Morrigan. Fue inesperado porque no era la primera vez que ocurría y esta elección de intervenir una en lugar de otra me sorprendía cada vez. Otras veces en el pasado, invocaba a Morrigan y era Sif quien venía a ayudarme, como si decidieran entre ellas quién debía intervenir. Me di cuenta de que en ese momento necesitaba comunicarme con Morrigan, y que si las diosas habían elegido esto para mí, debía significar que era la elección más acertada: las diosas sabían mucho mejor que yo cuál era la solución correcta y me quedé maravillada por esta increíble colaboración que existe entre divinidades poderosas de ese calibre. Entonces llegó la poderosa diosa Morrigan para responder a mis preguntas y guiarme hacia la práctica correcta. Recuerdo aquella noche con gran emoción. Alexander y yo estábamos invocando a Sif, pero llegó Morrigan: nos proporcionó tanta información que tuvimos que pasar varios días reelaborándola, hablando de ella y reflexionando juntos para comprenderla en su totalidad. ¡Nos lo contó todo y más! Solo quería una pista de ella, pero llegó y nos reveló tanta información que tuvimos que tomar notas para no olvidarla, ya que era mucho lo que nos estaba revelando. Era de un nivel tan alto que era difícil seguir el ritmo, ¡era increíble! No tenía ninguna duda sobre el increíble conocimiento que tenía esta diosa, pero cuando empezó a revelarnos todas esas respuestas que ni siquiera imaginábamos que nos daría, nos dimos cuenta de lo mucho que sabía y mucho más de lo que hacía creer a los demás. Pensar que «solo» nos reveló la información que nos iba a servir en ese momento, mostrándosela a los dos con una maestría que solo una psíquica poderosa podía tener, nos llevó a preguntarnos cuán vasto era su conocimiento en todos los demás ámbitos que sin duda no nos había mostrado en esa «breve» sesión práctica.

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