Seleccionar la parte del texto que deseas aclarar (80 words max)
Step 1 - N° 4

No estás aquí por casualidad…

Página 1 de 3

Siempre me han preguntado:

“¿Por qué la gente no entiende que Dios existe? ¿Por qué la gente no cree en el Alma y en la capacidad de vivir otra vida después de la muerte? ¿Por qué la gente está convencida de que todo lo que ven es real sin ni siquiera cuestionarlo? ¿Por qué la mayoría no cree en estas cosas o no las comprende?”.

La respuesta puede parecer obvia, pero no todos somos iguales, ya que no todos están preparados para conocer y aceptar la verdad. No tengo intención de catalogar a las personas con unas etiquetas, pero me gustaría simplemente hacer comprender la diferencia entre los que siguen evolucionando y buscando la verdad de vida en vida y aquellos que no están para nada interesados en conocerla ni mucho menos en comprenderla. Hay personas que están preparadas y empeñadas a querer saber ciertas informaciones, y otras en cambio no. Podemos dividir a la gente según tres maneras de pensar:

1 – Aquellos que no creen en nada y como tales no quieren que alguien crea en todo lo que puede definirse como “paranormal” o “espiritual”. Ellos están extremadamente convencidos, dentro de su escepticismo y de sus ideales, de poseer la única verdad absoluta y pretenden que todos los demás en el mundo piensen como ellos. Si alguien piensa de manera distinta, lo identifican inmediatamente como un “loco”, tratándolo como si fuera estúpido, sin darle la más mínima oportunidad de ser escuchado y conversar. Paradójicamente, una parte de estos escépticos son religiosos convencidos que creen en el Sacerdote, pero no en el verdadero Dios, ya que están convencidos de que para comunicarse con Dios es realmente necesario pasar por la voz del Sacerdote, y que de lo contrario no se podría comunicar directamente con Él. Sin embargo, al mismo tiempo se olvidan del verdadero objetivo y dejan de lado la comprensión de Dios. Muchos otros son completamente escépticos, no por un ideal sino por pura pereza, porque creen que encontrar respuestas es demasiado agotador. Por lo tanto, según ellos es mejor convencerse – y convencer a los demás – de que nada más existe a parte de lo que ya se sabe. Independientemente de si este tipo de personas tienen razón o si saben perfectamente que están equivocadas, seguirán imponiendo sus pensamientos incluso a costa de sofocar los de los demás, porque están convencidos de que nada existe, o de que existe solamente si primero lo confirman ellos de primera mano.

2 – Después encontramos a los que dicen que no creen en nada, más por miedo o porque no han tenido experiencias importantes que les hicieron cambiar de idea, pero que no tienen ningún interés en imponer sus opiniones a los demás. De hecho, no se enfadan con quienes, en cambio, creen y hablan sobre temas espirituales. Podríamos definirlos como unos “agnósticos inofensivos” porque, a pesar de tener una mente cerrada, aceptan la diversidad y la mentalidad abierta de los demás, sin la obsesión de querer imponer sus creencias. Podemos añadir a esta categoría de personas también a los que escuchan el pensamiento y las experiencias de los demás, y tal vez creen que estas experiencias son reales, pero aun así no están interesados ​​en profundizar en este tema, aunque lo acepten y lo respeten.

Página 2 de 3

3 – Por último, están aquellos que muestran una gran sed de conocimiento, que a veces están dispuestos a satisfacer cueste lo que cueste. No todos se dan cuenta de ello de inmediato: hay quienes han estado profundamente interesados en todos los temas espirituales desde la infancia y quienes, en cambio, se han dado cuenta solamente con el pasar de los años de estar intrigados por un tema en particular. Sin embargo, todos ellos tienen unas características en común: no les importa lo que otros digan, porque siguen su curiosidad, que a veces es una verdadera sed, hasta que alcanzan las respuestas que querían obtener. No importa si alguien está en contra y trata de hacerles cambiar de opinión, porque este tipo de personas quiere conseguir respuestas y las buscará hasta que las encuentre. Una parte de ellos ya es consciente de lo amplio que es el mundo espiritual, por lo que decide abrir su mente a la mayor cantidad de información posible sobre los temas más variados. Otra parte está más limitada en su búsqueda, porque está interesada solo en un asunto determinado o en una pequeña área, probablemente porque son los únicos temas sobre los que tiene experiencias de primera mano y busca una explicación sobre lo que le ha ocurrido. Sin embargo, con el tiempo estos últimos podrían descubrir que, aparte de ese tema específico, hay muchos más que podrían atraer su atención y abrir sus mentes a múltiples campos espirituales. En cierto sentido, es como si una persona hubiera pasado su vida buscando a Dios, pero durante la búsqueda hubiera empezado a descubrir que más allá de su presencia también hay algo más, como la posibilidad de reencarnarse y, por lo tanto, vivir una vida después de la muerte; lo que es muy distinto de lo que la religión nos ha enseñado.

Una vez explicadas estas tres categorías de personas – que obviamente son mucho más amplias y complicadas que el breve resumen simplificado y abreviado que he hecho para evitar extenderme – podemos decidir dividirlas con dos términos mucho más simples: quién es espiritual y quién no es espiritual. Los dos primeros tipos de individuos que he descrito son aquellos a los que yo defino como Gaia’s Low, es decir personas que no se preocupan por descubrir la verdad a través de hechos concretos y que quieren vivir su rutina sin que aparezca ninguna novedad. Han decidido cerrar su mente que está radicada en lo que ven con los ojos físicos y, por lo tanto, su perspectiva queda extremadamente reducida. Además, están decididos a continuar por ese camino, por lo que no son lo que se puede llamar una “persona espiritual”. Por otro lado, la tercera descripción puede identificar qué es una persona espiritual, es decir, quienes – sin siquiera haberlo decidido abiertamente – han empezado a buscar respuestas a sus muchas preguntas, escuchando cada vez más a su instinto que los llevó a seguir un camino espiritual. A diferencia de lo que uno piensa, no todos nacen con las ideas claras, con un sexto sentido súper evolucionado y con un interés hacia todo lo que está “oculto”: muchos de ellos nacen y crecen como la gente común, pero con un sentimiento interno de querer descubrir algo que, racionalmente, incluso ellos no saben explicar. En el fondo perciben que deben buscar las respuestas a esas preguntas que tal vez ni siquiera saben que tienen. No todos sienten la necesidad inmediata de estudiar los temas espirituales y conocerlos todos, de hecho, siempre se empieza a interesarse a uno o pocos temas, que luego puede que te lleven a descubrir nuevos conocimientos incluso fuera de tu área de interés inicial. Después de todo, cuando comienzas a conocer el mundo espiritual, o mejor dicho el mundo real, te das cuenta de que una pequeña información ya no es suficiente para llenar tu sed, porque quieres saber más y una cosa te lleva a otra. A pesar de la rutina y todo lo que les quita tiempo cada día, estas personas sienten dentro de ellas un fuerte impulso a buscar algo, quieren conocer y aprender siempre más, podríamos decir que tienen tanta hambre de conocimiento que no se sienten satisfechos con el primer mordisco, como ocurre a mucha gente.

Por lo tanto, existe una divergencia considerable entre quién podríamos definir “espiritual” y quién, en cambio, “no espiritual”. Los que podemos llamar espirituales son personas impulsadas por el deseo de descubrir y evolucionar. En realidad, estas personas ya son más evolucionadas en muchos aspectos comparado con la gente común, aún sin saberlo o sin darse cuenta, y es por eso que sienten que quieren seguir descubriendo: porque siguen su instinto en lugar de ir con la corriente, es decir “lo que tienes que hacer porque todos lo hacen”. Los espirituales no hacen algo solamente para seguir a la masa, por lo que no dejan de buscar respuestas solo porque generalmente la masa no busca respuestas.

Los “no espirituales” no sienten esta fuerte necesidad de conocer.

Página 3 de 3

Algunas veces podrían mostrarse interesados y curiosos durante un tiempo, pero para ellos el conocimiento no es necesario porque es solo un pasatiempo que abandonan y olvidan enseguida. La verdadera razón de esto es que no están preparados para comprender y aceptar que la realidad que siempre han conocido como verdadera esconde muchas más rarezas y falsedades de lo que imaginan, por lo que sienten repelencia hacia los conocimientos superiores. No tienen ganas de descubrir la verdad, por eso aceptan voluntariamente dejarse llevar por las mentiras.

Si estás aquí es porque tú estás preparado para conocer. No es una casualidad que tú estés aquí leyendo estas palabras. Tú estabas buscando la verdad. Dentro de ti había algo que gritaba, te impulsaba a buscar, algo que quería explotar y decirte: “¡Está allí, está allí!”, pero tú no estabas preparado para escucharlo, tenías demasiado miedo o estabas demasiado sumergido en la rutina que silencia tu instinto. Después, de repente, sin ni siquiera darte cuenta has llegado aquí. Nadie te ha obligado a leer mis escritos, salvo tu propio Instinto. Yo podría ser una persona cualquiera, pero hay algo que te empuja a leer y a seguir alimentándote de mis palabras, porque sabes que no son sólo palabras. Estas son demostraciones experimentadas personalmente que cuentan de un mundo en el que estamos todos. No te diré que te estoy ofreciendo la Verdad Absoluta, más bien insistiré en decirte que pruebes este conocimiento de primera mano, leyendo, experimentando y verificando lo que sigue, para que tú mismo confirmes que lo es. Existen dos tipos de personas en el mundo: las que no están preparadas y las que hoy tendrán un inicio de despertar, esa prueba que habían estado buscando durante mucho tiempo. Mientras estás leyendo estos documentos, puede que experimentes algo, desde pequeños escalofríos positivos que recorren tu cuerpo, escalofríos que te hacen sentir bien y que te emocionan, hasta sensaciones mucho más fuertes y difíciles de describir sino diciendo que “nunca las has probado antes”. Esto ocurre a los que defino “espirituales”.

Tú estás preparado para empezar, no tengas dudas. Las personas no espirituales no pueden comprender lo que un espiritual consigue entender. No se trata de inteligencia, sino de evolución. Las personas espirituales lo son desde hace mucho tiempo, todavía antes de nacer. Tienen un conocimiento más ampliado dentro de ellas, no saben por qué, pero saben que todo esto existe y es real, independientemente de que otros lo niegan. Algunas personas espirituales conocen muy bien la existencia de todo esto, otras empiezan con una visual reducida, pero esto no es importante: con el tiempo y con la experiencia todas perfeccionarán sus conocimientos.

Hay una diferencia importante entre “espiritual” y “no espiritual”. Tú eres un ser espiritual, un ser mucho más poderoso de lo que piensas, que quiere despertarse lo antes posible. Para hacerlo, sin embargo, hay que comenzar desde una base. En primer lugar, entender por qué no recuerdas quién eres. Tú eres un huésped en este planeta, eres distinto a los Gaia’s Low… estás de paso. Tienes misiones en esta época, pero continuamente tratas de negarlo porque tienes miedo de descubrir demasiado. No lo recuerdas, pero estás aquí por una razón.

Durante este camino comprenderás por qué no recuerdas Quién Eres, por qué estás aquí y si olvidarlo todo fue tu elección o no. Por el momento sólo puedo asegurarte de que No estás aquí por casualidad. Continúa con los siguientes artículos, porque encontrarás las respuestas a tus preguntas.

Fin de página 3 de 3. Si te gustó el artículo, comenta aquí debajo describiendo tus sensaciones al leer o practicar la técnica propuesta.

Este documento es la traducción del artículo original del sitio web Accademia di Coscienza Dimensionale: https://www.accademiadicoscienzadimensionale.com/archives/4635

Este documento es propiedad de https://www.accademiadicoscienzadimensionale.com/. Todos los derechos están reservados, se prohíbe cualquier uso no autorizado, total o parcial, de los contenidos presentes en este portal, incluido el almacenamiento, reproducción, reprocesamiento, divulgación o distribución de los contenidos mismos a través de cualquier plataforma tecnológica, soporte o red telemática, sin previa autorización escrita por parte de Academia de Consciencia Dimensional, A.C.D. Cualquier violación será procesada mediante acciones legales. ©

3343 comentarios
  • Pablo.B - 20:45 26/04/24

    Faccio parte della terza categoria di persona,mi ritengo un essere spirituale che ha tanta sete di sapere,credo che nell'Accademia troverò tutte le risposte perché la mia anima nn ricordi o abbia voluto chiudere i canali della conoscenza

  • Leonella - 21:08 24/04/24

    Sono felice di sentirmi nella terza categorie di persone. Mi sento diversa da quando ero piccola. Tutti mi definivano strana, particolare... E così è stato sempre nella mia vita, ero strana per tutti. Mi sono sentita spesso fuori luogo. Ho desiderato perfino di scoprire di essere nata in un'altra famiglia, tipo scambio di culle... Per me è sempre stata incomprensibile la differenza che sentivo tra me e i miei famigliari, così concreti, disinteressati a tutto quello che sentivo io e che piaceva a me. Nel mio lettino, avrò avuto 6 anni, sentivo una mano che mi accarezzava, ma non c'era nessuno, e non potevo certo parlare a qualcuno della mia famiglia di quanto mi accadeva, ero sonnambula e spesso mi sentivo sollevare e poi ricascavo pesantemente sul materasso. Ecco questa ero io da bambina. Ero gia destinata a entrare nella terza categorie di persone, nonostante la mente mi abbia ripetutamente portato via dalla strada del risveglio.

  • Robert - 04:18 23/04/24

    Grazie per questo articolo. Non solo non sono qui per caso ma ultimamente noto come, a seconda delle esperienze che sto vivendo, vengono a me informazioni che servono proprio in quel momento. Quando ero piu giovane ho odiato la mia sensibilità, sentendomi sempre emarginato e cercando un po di accettazione. Ora capisco che avrei dovuto ascoltare di piu il mio cuore piuttosto che la voce degli altri. Mentre leggevo l'articolo mi sono emzionato molto perché mai nessuno mi ha fatto sentire parte di qualcosa come queste righe scritte. Grazie

    • Leonella - 21:59 24/04/24

      Mi sentivo anch'io come te, e ho cercato disperatamente l'accettazione degli altri cercando di essere "normale", di fare una vita che la mia famiglia accettasse, che chi frequentavo accettasse... Se non facevo così mi sentivo tristemente sola, emarginata, abbandonata. Ci sono voluti anni di amore per me stessa per arrivare qui.

  • Claudia Valenti - 14:22 22/04/24

    Immensamente grata di essere qui , si lo credo anche io essere qui non è un caso, la voglia di conoscenza e molti altri fattori , mi hanno portata qui, per dare la possibilità alla mia anima di evolvere è crescere in armonia è pace, si ritrovare pace, nel mio spirito ed anima di luce . Grazie non mi fermerò mai di ringraziare voi è lˋuniverso.

  • spiritualgrowth - 10:24 22/04/24

    Questo articolo mi ha fatto provare la sensazione di farfalle allo stomaco in quanto mi ci sono rispecchiato molto nel terzo tipo di persona, ma mi ha fatto ricordare diverse brutte esperienze con le persone del primo tipo descritte nel documento, soprattutto nella prima fase della pubertà fino alla fine. Fin da bambino sono stato attratto dal paranormale e all’età di 10 anni mia sorella mi regalò un libro abbastanza ben fatto sull’occulto e sviluppo di facoltà psichiche (un libro che un bambino non dovrebbe leggere, infatti era esclusivamente per adulti e io non ne capì mai il significato fino in fondo) e da quel momento sono sempre stato più attratto dall’esoterismo, stregoneria e sviluppo spirituale. Dalla tenera età di 5 anni fino ai 16 anni fui considerato dalla maggior parte delle persone come un tipo strano, ma è il periodo tra i 12 anni e i 14 anni che fui etichettato come stupido, strano, boccalone e vari dispregiativi che non sto qua ad elencare e ciò solo perché mi piaceva e credevo (e credo e mi piace tutt’ora) al paranormale e allo sviluppo spirituale; mi sentii un reietto della società, soprattutto nei momenti in cui avevo a volte forti sensazioni che sarebbe successo qualcosa di brutto a qualche mio conoscente e quando glielo dicevo e poi si verificava mi davano dello iettatore oppure quando percepivo che una determinata persona all’apparenza bonaria in realtà fosse doppiogiochista e sleale (a volte anche pericolosa) mi fu detto che mi facevo film mentali e fossi pessimista (peggio se poi detto da un padre seppur in rarissimi casi) seppur poi si dimostrò che ebbi ragione. Ora non mi sento più un reietto, anzi, confronto a quelle persone che mi hanno deriso e isolato mi sento un essere speciale. Grazie per questo articolo che mi ha fatto scoprire che non sono l’unico ad essere come il terzo tipo di persona descritta in questo documento.

  • SpiritualGrowth - 12:17 21/04/24

    Questo articolo mi ha fatto provare la sensazione di farfalle allo stomaco in quanto mi ci sono rispecchiato molto nel terzo tipo di persona, ma mi ha fatto ricordare diverse brutte esperienze con le persone del primo tipo descritte nel documento, soprattutto nella prima fase della pubertà fino alla fine. Fin da bambino sono stato attratto dal paranormale e all’età di 10 anni mia sorella mi regalò un libro abbastanza ben fatto sull’occulto e sviluppo di facoltà psichiche (un libro che un bambino non dovrebbe leggere, infatti era esclusivamente per adulti e io non ne capì mai il significato fino in fondo) e da quel momento sono sempre stato più attratto dall’esoterismo, stregoneria e sviluppo spirituale. Dalla tenera età di 5 anni fino ai 16 anni fui considerato dalla maggior parte delle persone come un tipo strano, ma è il periodo tra i 12 anni e i 14 anni che fui etichettato come stupido, strano, boccalone e vari dispregiativi che non sto qua ad elencare e ciò solo perché mi piaceva e credevo (e credo e mi piace tutt’ora) al paranormale e allo sviluppo spirituale; mi sentii un reietto della società, soprattutto nei momenti in cui avevo a volte forti sensazioni che sarebbe successo qualcosa di brutto a qualche mio conoscente e quando glielo dicevo e poi si verificava mi davano dello iettatore oppure quando percepivo che una determinata persona all’apparenza bonaria in realtà fosse doppiogiochista e sleale (a volte anche pericolosa) mi fu detto che mi facevo film mentali e fossi pessimista (peggio se poi detto da un padre seppur in rarissimi casi) seppur poi si dimostrò che ebbi ragione. Ora non mi sento più un reietto, anzi, confronto a quelle persone che mi hanno deriso e isolato mi sento un essere speciale. Grazie per questo articolo che mi ha fatto scoprire che non sono l’unico ad essere come il terzo tipo di persona descritta in questo documento.

  • fidel - 01:46 18/04/24

    L'articolo è senza dubbio lucido, preciso, chiaro. Non siamo tutti uguali. ovvero siamo nati con dei livelli di sensibilità verso certi argomenti estremamente diversificati. Assolutamente questo non significa che chi non ha questo tipo di sensibilità sia peggiore, ma forse sta mancando uno dei principali obiettivi da raggiungere in questo percorso ad ostacoli che è questa vita. Conoscere se stessi. E tale percorso non è per niente agevolato, la vita di tutti giorni con le sue regole, tante regole e necessità, bisogni, difficoltà di ogni tipo, ci leva tempo e concentrazione. questo sono quelle che potremmo definire le armi del grande ostacolatore. Ma quella vocina a volte flebile dentro di noi, c'è sempre e ripete sempre la stessa cosa . Ricordati perchè sei qui.

  • Tommy - 00:00 18/04/24

    articolo affascinante e che mi fa capire he sicuramente non sono qui per caso, ma per un motivo. Proseguo per affacciarmi e entrare dentro sempre di più in questo mondo spirituale e reale.

  • shirel - 12:45 17/04/24

    Ho letto l'articolo mentre ascoltavo contemporaneamente l'audio ed ho sentito fortemente dentro di me la Gioia di trovarmi qui in A.C.D.! In quest'ultimi tre anni ho avuto questa continua sete di conoscenza ed in silenzio, ho cercato senza sosta risposte alle mie esperienze spirituali. Fregandomene del sistema, sono andata controcorrente alla ricerca della Verità che vibra dentro il mio cuore. Senza dubbio, adesso sono pronta a mettermi alla prova, impegnandomi costantemente, con coraggio e determinazione! Voglio ricordare e finalmente dopo varie ricerche, so con certezza che non sono qui per caso.... Grazie A.C.D. per l'emozione ed il coraggio che donate!

  • anna18 - 21:07 16/04/24

    Questo articolo ha descritto perfettamente quello che succede sempre ormai, in particolare le persone che appunto vogliono conoscere sempre più e altre che pensano già di essere arrivate alla verità. Io posso dire di avere sempre con me una curiosità verso ciò che non conosco e che a volte mi spaventa anche, molte volte mi è capitato di venire a conoscenza di un qualcosa che mi faceva provare una certa ansia, però allo stesso tempo sentivo dentro di me una curiosità che cresceva sempre di più; mi sono sempre definita una persona curiosa e sto vedendo che questo sta solo aumentando. Ovviamente mi capita molte volte di parlare con persone che non si dimostrano aperte alle opinioni altri solo perché sono convinti di ciò che pensano, anche se alcune volte sono del tutto sbagliate e quando mi trovo difronte a persone così evito anche di esprimere ciò che penso perché so che verrei criticata, contraddetta e forse anche giudicata, però questo mi fa capire sempre di più che ci sono persone che hanno una mentalità troppo chiusa, io al contrario sono felice di poter dire di avere una mentalità più aperta e cercherò di mantenere sempre la mia curiosità, perché so che è anche questa che mi aiuta

  • cl@ - 15:37 16/04/24

    Le tre tipologie di persone descritte sono state ben evidenti da sempre nella mia vita, a lavoro, in famiglia, negli amici/conoscenti e addirittura partner, io stessa ammetto di essere passata più o meno per tutte le "categorie". La differenza è che prima non riuscivo a a capire cosa mi rendesse "diversa". La spiritualità in me è merito della mia famiglia , più la mamma, fondamentalmente di buoni cristiani gran lavoratori. Poi ad un certo punto la mia spiritualità credo si sia presa una pausa per poi avermi portato dove sono ora, piano, piano. Il mio scopo è acquisire sempre più la consapevolezza di me stessa, così da mettermi in contatto con quello che sono. Non interferendo più e iniziando il mio risveglio. Il finale dell'articolo mozzafiato per la prima volta nella mia vita mi sono chiesta: "chi sono io?". Personalmente non so se rendo l'idea ma ho le farfalle al basso ventre. Chissà per quale motivo avrò scelto di non ricordare.

  • gianni67 - 07:22 16/04/24

    Ho riascoltato questo audio e lo trovo ancora più mio e espressivo del mio sentire quando riprendo il cammino su ACD. Mi perdo e poi ritorno verso questa fontana che sento abbia acqua nuova per la mia sete di spiritualità.

  • blue92 - 16:32 15/04/24

    Bellissima questo articolo, mi fa sentire compreso finalmente e non più solo. Da quand’ero piccolo ero molto affine con il tema della spiritualità però ero diffidente su quello che dicevano del prete e della chiesa, questo non vuol dire che non credo in Dio, anzi, ma credo anche che c’è un ritorno alla vita in un corpo diverso. Il non poter parlare liberamente con qualsiasi persona perché chiunque crede a solo quello che l’uomo ha diffuso e occultato su molte verità. Io lo so che non sono qui per caso e questo mi ha dato un vero scopo nella vita. Grazie infinite

  • Cosmic Feather Medaglia per aver completato lo Step 1 per la 2ª volta Medaglia per aver completato il libro Prendiamo Coscienza degli ALIENI - Vol. 1 per la 2ª volta Medaglia per aver completato il libro Prendiamo Coscienza degli ALIENI - Vol. 4 Medaglia per aver completato il libro Prendiamo Coscienza degli ALIENI - Vol. 5 Medaglia per aver completato il libro Prendiamo Coscienza degli ALIENI - Vol. 6 - 11:36 14/04/24

    Questo è uno degli articoli che più mi piace del 1 Step. Ricordo l'emozione che provai qualche anno fa quando lessi per la prima volta questo documento. Ad oggi è ancora piacevole rileggerlo perché ti fa anche rendere conto della strada che si ha percorso finora. Ogni tanto è importante guardarsi indietro per smettere di dare per scontato i cambiamenti e gli avanzamenti che si sono ottenuti. Ho sempre sentito una spinta a ricercare qualcosa in più rispetto alla realtà che conoscevo. È vero quando è stato detto che una conoscenza tira l'altra, nel senso che all'inizio mai mi sarei aspettato di addentrarmi cosi in profondità nelle tematiche spirituali, ma non perché non fossi interessato agli argomenti, bensì perché non ne ero proprio a conoscenza. Sono sempre molto contento di prendere consapevolezza che ad oggi sono ancora qui in Accademia e non ho intenzione di mollare questo bellissimo Percorso per nulla al mondo.

  • Antoine - 11:00 14/04/24

    Articolo molto bello ed emozionante. Effettivamente, mentre l'ho letto, ho provato delle bellissime sensazioni. Purtroppo ci sono persone che non credono minimamente in Dio, non credono che ci possa essere dell'altro e prendono troppo seriamente il videogioco in cui ci troviamo. "Non sei qui per caso": questa affermazione nasconde molte verità. Sin da piccolo ho sempre sentito un vuoto dentro di me che non sono mai riuscito a colmare in nessun modo. Mi sono spesso posto delle domande alle quali non sono mai riuscito a dare delle risposte. Anche quando apparentemente avevo tutto ciò di cui una persona ha bisogno, avevo sempre un'insoddisfazione alla base. Finalmente sono giunto qui in Accademia e ci tengo a precisare che questo è il primo Percorso Spirituale che intraprendo nella mia vita. Sento una connessione bellissima con questo Percorso grazie alla sintonia profonda che provo nel modo di Angel nel dire le cose. Non vedo l'ora di continuare.